Historia de una amistad: Las cosas que nunca te dije

Dicen que los amigos no siempre se parecen. Alguna vez escuché también que mientras más distintos es mejor. A mi, no me importan todas esas frases con sabor a libro de autoayuda, me gusta crear mis propias historias y mi propio libro de vida. Y esta, además. es una muestra para los que no creen en que las amistades son para toda la vida.

Si tuviera que escribir una historia sobre amistad, comenzaría por esta, porque aunque nunca te lo he dicho me enseñaste el significado de amistad cuando aún no aprendía a sumar, y me demostraste que aún siendo distintas, nuestro corazón tiene una conexión casi irrompible y con el tiempo cada una ha tomado lo mejor de la otra.
De 0 a 7 años
Hemos crecido juntas y nuestra historia de vida se teje casi en paralelo. Ni siquiera recuerdo cuándo te conocí, pero podría jurar que aún estaba en pañales. Los recuerdos de entonces son bastante borrosos, salvo por que cada una tenía una muñeca favorita y un juego favorito.
Luego mi recuerdo vuela hasta sus 4 años y medio. Nos llevamos 2 años y eres la amiga “más chiquita” que tengo. Cuando cumplí seis llegaste a mi cumpleaños con una maya de flores dispuesta a arrasar con toda al fiesta bailando “Sopa de Caracol” y ¡Ganaste el concurso de baile! Parecías una licuadora moviéndose, pero además luego de ver el video vi como mi madre le hacía ojitos al payaso para que seas “La elegida”.

Cuando Diego y Omar “nuestros novios de infancia” se fueron a vivir a Estados Unidos ambas nos abrazamos en el Aeropuerto llorando por nuestra primera pérdida sentimental. Teníamos cinco o seis años.

Establecimos a lo largo de los años una rutina de juegos, casi siempre los mismos, con tus juguetes o los míos. A partir de entonces nuestras mamás ya nos vestían igualitas, nos compraban los mismos juguetes y nos llevaban a los mismos lugares. Nunca nos hostigamos ni te odié porque conociste Disney y yo no.

De 7 a 12 años
Comenzaron las primeras “peleítas”. Primero por determinado juguete, luego por opiniones distintas. Hicimos un club, preparábamos postres y mojábamos a transeúntes en carnavales, jugábamos en la computadora y siempre me ganabas en Tetris. Nunca me cayeron sus amigos del colegio y odiaba a tu perro porque siempre me miraba con cara de querer cenarme. Hasta que una vez casi me cena. Pasábamos las tardes con tu papi en los juegos mecánicos juntando las fichas para un juguete nuevo y terminábamos la faena comiendo comida rápida y quedándome a dormir en la cama de campaña de tu casa. Nos metieron a todos los cursos de verano juntas, solo que tú si aprendiste a pintar bonito y yo hasta ahora no dibujo pero ni una casita en el lago.

De 12 a 15 años
Insisto, no soportaba a tus amigas del colegio. Comenzabas a escuchar música totalmente desconocida para mí, pero fuimos juntas al concierto de Fey, conocimos juntas el zoológico de Huachipa y hacías piyamadas, alguna de las cuales hizo que nos peleáramos. Viajábamos, hacíamos campamentos en la playa, nos escapamos una noche en Kapala bajo la lluvia y la gracia acabo con mi brazo vendado. Por el camino tus amigas del cole desaparecieron, te cambiaron de colegio un par de veces, felizmente ya no nos vestíamos igual y comenzaban nuestras salidas nocturnas…cada a una a lugares distintos.
De 15 a 18
No conocía la mitad de tu colección de discos. Te mudaste terquísima a mi casa y te visitaba más seguido, tomábamos lonchesito, jugábamos cartas con tu abuela apostando monedas de baja denominación (y la mayoría de veces ganabas tú) Me nombraste “madrina” de tu nuevo perro con nombre de hierba alucinógena. Nos metimos juntas al gimnasio y comenzamos la dieta juntas, solo que tú si la continuaste y yo no. Tus amigas del cole me asustaban y te encaletabas chatas de ron entre la ropa. Te hiciste un piercing y un tatuaje que por lo general tu madre descubría seis meses después cuando ya todos sabían de la existencia de los mismos. Tocabas guitarra y no me dejabas cantar. Me regalaste el disco de Daniela Herrero porque no se quien tuvo la magnífica idea de regalártelo cuando tú le querías escupir. Me diste a guardar unas rislas que luego mi madre encontró en mi cajón. Te me fuiste a España nos sin antes comprarnos las mismas zapatillas hermanas y meternos una borrachera de aquellas en la que terminé diciéndote lo que ahora te repito “Eres como mi hermana”.
Desde los 18
Haz estado lejos casi cuatro años, pero durante todos mis cumpleaños me escribes algo bonito y bastante sentimental- para ser tú-. Conozco de manera virtual tu nuevo hogar, sé lo que estudias y lo que haces, he visto los videos cojudos que cuelgas en el youtube y sé que por donde vives hay pocos antros de perdición que ya conoces como la palma de tu mano. Me asustan las fotos que tIenes en tu Hi 5 y me rayan las locuras que pones en tu descripción, pero yo te conozco más que cualquier profile digital.
¿Y ahora?
Como habrás podido notar solo he descrito un poco nuestra historia de amistad, no he descubierto la pólvora ni he cambiado nada porque todo merece ser como en realidad fue, sin embargo, como le título de este post, no pretendo repetirte cosas que tú y yo ya sabemos porque las vivimos, sino pretendo escribirte las cosas que nunca te dije, porque estábamos tan ocupadas pasándola bien que nunca nos detuvimos a hacerlo.
Cuando te fuiste temí no tener la oportunidad de hacerlo, pero ahora, casi 20 años después entiendo que nunca es tarde. Así que toma nota de algunas cosas que nunca te dije, pero ha llegado el momento.

• Te quiero mucho, por ser tan distinta a mí y por habernos soportado tanto a pesar de nuestras diferencias. Alguna vez tuve ganas de mandarte lejos, pero nunca pude y ahora agradezco nunca haberlo hecho.
• No se con quién sales cuando sales, con quien te peleas ni a quien odias, no me has contado si te has enamorado últimamente ni si te han decepcionado, pero sabes qué, ¡me gustaría saberlo!
• Muchas veces no es necesario que alguien te diga algo para saberlo, por eso aunque eres mujer de pocas palabras, sé de ti más de lo que tus palabras me han comunicado.
• Si un día alguien te hace daño, iré a escupirle, si un día quieres regresarte a Lima, te daré mi casa y si algún día tienes ganas de llorar, aunque nunca te haya visto hacerlo, te pondré mi hombro y prometo no contarle a nadie.
  
  
  
  
  
  
  Lo que falte decir, lo que se me haya olvidado, y lo que nos falte vivir, todo eso lo dejamos para el 20 de Julio, el día en que nos encontraremos y amenazo firmemente en darte un abrazo del oso.
  

Te dedico esta canción (Parte I)

Hay personas que odian mis gustos musicales, otras que no les gusta que yo cante y los más valientes me acompañan al Karaoke. Hay personas que se han ido, otras se han quedado y otras han despaarecido. Hay personas que leen mi blog, otras a las que no les gusta, otras a las que realmente les da flojera, otras que ni saben que tengo blog y otras que ni saben qué es un blog.

Hay canciones que me recuerdan a esas personas que quiero y para todas ellas elegí una canción.

Nada valgo sin tu amor- Juanes
Discutimos maañana tarde y noche y somos realmente distintas. Nuestras ideas no son las mismas, pero la amo con locura y cuando no está y pongo esta canción la extraño más que nunca. Sin ella -literalmente- no estaría aquí. “Porque nada valgo, porque nada tengo si no tengo lo mejor, tu amor y tu compañía en mi corazón”.

Qué será- José Feliciano
A mi papá siempre le han gustado las canciones trágicas, esas que se escuchan con una galleta de soda al ladito de la vena. Insisto en remarcar que él nunca ha tenido que dejar su país, sin embargo, este tema que cuenta la historia de alguien que deja su pueblo por un futuro mejor es su favorito. De tanto cantármelo, se grabó en mi mente y cada vez que lo escucho me recuerda a su dramatismo. Bueno, pensándolo bien, a alguien tenía que salir yo ¿no?

Thank you - Dido
Hasta donde yo supe, mi abuelo no hablaba inglés. Más bien yo amaba cuando con su tono italiano me decía “Mi chocha linda”. Desde que él se fue, nadie más me ha dicho así, nadie más me llevó al Haiti a comerme la crema de su café. Cada vez que escucho este tema siento que es a él a quien le canto “I want to thank you for giving me the best days of my life”.

Amor eterno – Rocío Dúrcal
Mi abuela siempre me bromea con que le cante esta canción cuando ella ya no esté con nosotros, pensar en ese momento me causa escalofríos y mi madre me obliga a apagar la canción si ella está cerca porque se pone triste. Ella siempre ha estado en mi vida y siempre va a estar. Hace dos días me dijo que yo era su orgullo y yo jamás tendré como devolverle todo lo que ha hecho por mí en mis 22 años, solo decirle que tiene razón, mi amor por ella, es eterno.

Un senso- Vasco Rossi
Es la canción favorita de Marco y de vez en cuando hacía él intento desentonado de cantarla, lo peor es que yo hacía el intento de hacerle el acompañamiento y mi madre hacía el intento de no matarnos por tal catastrófico dúo. La letra dice que intenta buscarle un sentido a la vida, aunque yo sé que la de él si lo tiene porque estamos nosotros que lo queremos tanto (Qué humilde soy ja).

Navidad - Miranda
En realidad, cualquier canción de Miranda me remonta a la casa de Valeria, el olor de su incienso favorito y el sentirme como en casa resplandingada hablando de la inmortalidad del mosquito o planeando nuestra siguiente salida al Yacana. Miranda es para mí, sus pósters, sus discos, todas las chucherías que compramos juntas en Casa & Ideas, su hábitat, que siento un poquito mío también. En realidad hay tantas canciones Magia Veneno de Catupecu Machu, Better de Regina Spektor, Ill Stand by you de The Pretenders y Por ti de ella Baila sola, pero si tuviera que decir lo importante de nuestra amistad, tendría que escribir yo la canción.

Cuando no estás conmigo – Pandora
En realidad cualquier canción de Pandora me recuerda a Elena, porque es la única persona que comparte mis gustos musicales. Poner Pandora me hace recordar los 30 días que atormentamos a Alberto con esa música. Esos días, que fueron tan pocos, me regalaron una amistad tan bonita. Otra canción podría ser “Regresa”. – “Pero regresa, para llenar el vacío que dejaste al irte regresa”. Me retracto, no te has ido y eres el mejor regalo de News Report! ¿Si mi apellido fuera con C sería tan afortunada como Alison y tú?

Cha Cha cha – La Pequeña compañía

Debería consignar algo de Soda Stereo, pero esta canción para mi significa la casa de JC, (50 chelas después) fase del paso de la guitarrita y todos bailando este tema de quince minutos antes de llegar a la fase de palabras soeces. También podría poner algo de Soda Stereo tomando en cuenta que depuès de varios intentos fallidos de su parte, terminaron gustándome los argentinos, aunque me acuse de fan cuyuntural. Igual Pandora es Pandora y guardo de recuerdo el correo en el que me avisa que me esperaba una entrada para el concierto de Pandora. Pensándolo bien felizmente no compartimos los mismos gustos musicales, así mientras trabajamos juntos pude ir sin problemas a ver a Alberto Plaza, Janet, Pandora etc. Ahora he ampliado mi espectro musical y en gran parte gracias a él: Mi bipolar favorito.

Stay - Lisa Loeb
Fue su culpa, todo el día ella tarareaba esa canción. Un día me la hizo escuchar, me encantó y la obligué a que me copiara toda la letra para aprendérmela, luego la grabé en un casette después de llamar a Radio Planeta para que me la programen (Sí, es patético). También me recuerdan a a ella sus canciones con X, Z y demás voludeces escolares y últimamente Chilanga Banda de Café Tacuba, porque ella si fue al concierto y yo no. La odio por eso y la quiero por todo lo demás (que es realmente mucho).

Sabrocito y Dulzón – Natalia Oreiro
Naydeen, se compró el disco original, yo el bamba. Ambas cantábamos este tema frente al espejo gracias a nuestras aficiones por el canto y la figureteada. Por si acaso era 1998. La estupidez se perdona cuando tienes doce años. Peor sería decir que ambas escuchábamos Backstreet boys y Aaron Carter y que alguna vez en el coro de nuestro colegio nos hicieron cantar una canción cuya letra decía “La pelota es redonda” y con esas ganábamos el concurso interescolar de Música Nueva Acrópolis. El colegio se quedaba con el premio y nos daba a cambio una Cajita Feliz del MC Donalds. Inocencia infantil que le llaman.

Say it Aint so – Weezer

Esta canción me remonta a la calle Ocharán. Muebles verdes, un departamento chiquito pero acogedor. Me recuerda a todos los momentos bonitos con mis flacas igualitas favoritas. Una de las dos me pasó esta canción como diciendo “Aprende a escuchar algo distinto a Pandora” y desde entonces cuando la escucho me acuerdo de cuando solíamos compartir más tiempo juntas. Ahora las múltiples obligaciones de la vida no nos permiten compartir tanto como antes, pero el cariño sigue intacto, siguen siendo mis puntitos favoritos y cuando las sigo atacando con mis abrazos del oso. Cuando haga un post sobre recuerdos gastrnómicos ustedes serán los anticuchos, cuando haga un post sobre lugares ustedes serán su casa (no precisamente porque pasen mucho tiempo ahí, sino porque a mí me encanta y me trae lindos recuerdos) y cuando haga un post de películas serán esa película china "De vuelta a casa", que obligó a su mami a pasarme un rollo de papel higiénico y un vaso de agua para calmar mi dramatismo y para que deje de mojar con mis lágrimas sus antiguos muebles negros. Serán siempre serán. Cuando hable de visitas al cine, ahí si las omitiré, es conveniente, para que no quede registro de mi llanto deseperado.

Zapatos viejos- Gloria Trevi
Margot, es un pedacito de Mamakhán y toda su familia es especial para mí, sobretodo Cami que es mi engreída. Una de las tantas veces en su casa, después de cómo 15 chelas me dejaron poner esta canción y yo casi de manera inconciente me puse a bailar. Renzo me tomó fotos que aún guardo. En mi último cumpleaños me llegó un mensaje especial “Feliz cumple Gloria Trevi. Te queremos mucho Renzo, Ruth, Cami y Margot”. Solo puedo decir que yo los quiero más. Cami es mi engreída y yo la haré fan de la Trevi. Es más la próxima vez le llevaré mis discos y se terminará olvidando de Hi 5, Elmo y tanta tontería e iremos juntos a un concierto a cantar Zapatos viejos.

Guacamole - Kevin Johansen
Una canción con un título gastronómico tenía que hacerme acordar a Isela. Se decía fan de Gastón Acurio y cuando hubo la oportunidad que sea la fotógrafa de la entrevista que le hicimos JC y yo en Terra ¡Se quedó dormida! Luego inspiradas en la Aventura culinaria de Gastón hicimos nuestro reportaje para el curso de edición “La aventura del Ceviche”, trabajo en el que yo me dediqué a comer ceviche (para variar) y que terminamos con un tono en su casa bailando reguetón en el cumple de su hermano. Cuando Marianito crezca le eneñaré ese video y le contaré todas nuestras aventuras, incluídas las veces que tenía que salir corriendo para llegar a clases porque me dejaban ser la última en la ducha. Marianito escuchará Kevin Johansen, pero también Pandora, aunque me lo tenga que raptar para eso.

Amigos - Enanitos Verdes
Una vez Clau me paso la letra por msn. Ya no viene a mi casa, ya no me cuenta sus cosas. Hace poco nos graduamos y sentí que todo era como antes mientras nos alistábamos para culminar una etapa importante de nuestras vidas. Ver a su familia me movió fibras sensibles pero como ella alguna vez me dijo: “Las personas cambian y la vida también” (algo así era su floro) Solo le puedo decir “siempre serás mi amiga no importa nada más”. Nosotros no hemos cambiado. Margot, Isa y ahora Mariano estamos ahí.

Alguien que cuide de mi – Cristina Rosenvinge

“Eres como mi hermana Hip, hip” le dije después de varios rones el día de su despedida antes de irse a vivir a España. De niñas nuestras mamás nos vestían ridículamente igual y desde entonces ella tenía aficiones por la guitarra, pero nunca me dejó hacer los coros. Esta canción ella la cantaba y tocaba y yo la vine a conocer años después. Ahora que está lejos encontré una foto en la que las dos no pasamos de los dos años y estamos de la manito. Como dice la canción, puedo cuidar de ti, me puedo tragar tus penas, pero nada de matarme por ti y mucho menos matarte. Estás advertida.

Mmm mmm mmm – Crush Test Dummies
Ha sido el único chico que ha soportado todo mi ser en una moto, me ha transportado en ella varias veces a pesar de mis gritos desenfrenados. Podíamos caminar horas de horas hablando y hablando de la vida, comiendo grasas, churros, pollos, sanguchón Aramburú. Un día pasamos horas de horas en el Tercio de la Universidad escuchando esta canción y desde entonces, cuando la escucho me acuerdo de él (aunque dudo que me vuelvan a dejar pasar tanto tiempo en esa oficina) Lo quiero mucho y cumpliré mi promesa de dejarle mensajito en el Hi 5 por su cumpleaños que ya se acerca. Sigue siendo mi pelelín favorito, para cuando quiera regresar.

Cómo Hemos cambiado- Presuntos implicados

Último año del colegio. Mi benemérito centro de estudios organizaba para los graduandos una ceremonia llamada “Memory Night”, como lo dice el título, una noche de recuerodos que significaba un viaje por todos los años escolares, con fotos, alguna actuación del recuerdo y un par de canciones. Una de ella fue esta. Y simplemente, fue un tema casi profético, ahora puedo decir como hemos cambiado y que lejos ha quedado aquella amistad. Tengo buenas amigas del colegio a las que todavía frecuento. Esta canción me hace viajar por esos once maravillosos años, y desear que todos los que me acompañaron en él estén bien, donde quiera que estén.

Aprendiz - Alejandro Sanz
“Me has enseñado tú, tu has sido mi maestra para hacer sufrir, si alguna vez fui mala lo aprendí de ti. Las dos queríamos a Sanz y las dos teníamos algo especial, pero puedo decir-Gracias a Dios- que no somos iguales y que a veces, cuando la vida te aleja de alguien, es para bien.

Continuará...

30 cosas que cambiar antes de cumplir 25

Mamá dice que no le gusta que la abrace tanto, Vale merepite que no debo confiar en todos y se burla por mi colección de discos de Lucero, Elena se estresa cuando cruzo la pista en verde y mi hermano me quiere matar cuando me pongo a cantar. Aún guardo la efímera ilusión de complacerlos a todos, pero en el fondo sé que cumpliré mi cuarto de siglo manteniendo toda la lista de manías que enumeraré a continuación.
Este no es un mea culpa, es la versión opuesta de los perfiles del Facebook y HI 5 que son un aplauso al ego, es una manera de mostrar que las manías cotidianas son tan divertidas como peligrosas e incambiables.


1. Caminar descalza
2. Cantar por las calles (y en el micro, en el taxi, ¡En la oficina!)
3. Abrazar a los que quiero….y cuando quiero
4. Confiar en demasía
5. Enrojecerme con facilidad
6. Cruzar las pistas en verde
7. Gritar y ponerme nerviosa en los temblores
8. Correrme de las agujas, sobretodo si son inyecciones
9. Echarme en las piernas de alguien cuando viajo en carro
10. Ver una película varias veces (y llorar todas las veces)
11. Escuchar la canción que me gusta de manera reiterativa hasta que no la soporte más.
12. Extrañar aún cuando me divierto, la paso bien o estoy de vacaciones
13. Cruzarme la pista si veo un perro grande
14. Escuchar de vez en cuando canciones de Parchis, Topo Giggio y Nubeluz (y tenerlas debidamente registradas en discos, mp3s o Long Plays)
15. Decir que tengo varios novios (Alejandro Sanz, Gianmarco, Leonardo Di Caprio o similar) sobretodo cuando en realidad no tengo ninguno.
16. Comer demasiada comida chatarra y decir que “Estoy a dieta” cada vez que me ofrecen salsas para acompañar mi –por lo general- cuantioso pedido.
17. Creer Que todos son buena gente y si me advierten de malas intenciones responder “No, eso es imposible”.
18. Ser desubicada y perderme en la esquina de mi casa hasta cuando doy una vuelta sobre mi propio eje.
19. Tenerle miedo a los caballos y creer que me patearán si pasó por detrás de ellos.
20. Tenerle miedo a los cuetones, cuetes, fuegos artificiales…y a las chispitas “Mariposa”.
21. Cantar villancicos todos los diciembres hasta hostigar a todos con “Ven a mi casa esta Navidad“
22. Cantar Im Singing in the rain” en las pistas todas las veces que llueve de noche”
23. Escribir correos largos, súper largos a personas que se me contestarán una línea.
24. Ver demasiadas novelas mexicanas…hasta las de corte infantil.
25. Que me guste la ropa rosada y que el rosado sea mi color favorito
26. Cada vez que saludo a alguien por su cumpleaños, comenzar la llamada con “Estas son las mañanitas que cantaba el rey David”
27. Ponerme demasiado sentimental una vez al mes y llorar si pasa un mosquito.
28. Decir que todos los bebés que quiero son “mis hijos” y querer un hijo pronto
29. Preferir en las tiendas de discos Lucerito, Pandora, y todos los discos que por lo general están en las secciones de remates.
30. Que cada vez que se me suba el alcohol a la sangre pregunte a diestra y sinistra si determinada persona “Me odia”.